martes, 2 de agosto de 2011

L'amour...toujours?

No te das cuenta de que se ha terminado hasta el mismo momento en el que, una por una, repasas todas vuestras fotografías juntos y te das cuenta de que nada volverá a ser lo mismo, a ser lo de antes.
Cuando poco a poco van cayendo de tus ojos y sobre tus mejillas lágrimas que recorren tu piel en carne viva, que se asfixia de dolor. Y de repente estás llorando, no puedes más. Lloras, lloras y lloras. Pero sabes que no va a solucionar nada, que él está lejos y no te oye, ni tan siquiera te ve.
Y es entonces cuando te arrepientes de cada error, por mínimo que fuera y piensas que todo hubiera sido distinto si no hubieras cometido pequeñas estupideces que, aunque él dice que no, sabes que fueron culpa tuya.
Pero nadie, nadie ni tan siquiera él van a poder hacerse una idea sobre lo feliz que fuiste.
¿Por qué fuimos tan felices? Porque juntos no fuimos 'SS' por separado, fuimos sólo UNO.
Probablemente preguntarás qué haces por las noches, cuando parecen eternas y que la luna no brilla. Creerás que he olvidado cada recoveco de tu cuerpo, cada caricia de tus labios o la textura de tus manos. Pero me acuerdo... me acuerdo de todo aquello como si fuera la primera vez que los tocara, como si nunca tuviera fin, como si siguieras abrazado a mí. Tan pegado a mí...

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